domingo, 11 de abril de 2010

Siberia

La visión de Siberia desde el aire es sobrecogedora. A 10.000 metros de altura, como una mota diminuta colgada en el techo de la estepa, uno se siente verdaderamente insignificante ante tanta inmensidad. Kilómetros y kilómetros de tierra helada y plana, hasta donde abarca la vista, limitada solamente por el horizonte que da paso a un cielo intensamente azul y adornado el blanco suelo por jirones de tierra oscura, la cicatriz retorcida de algún río y los lagos mansos que salpican el paisaje.
Esta vastedad se me antoja comparable únicamente al mar. Podría decirse que estamos ante un mar de tierra y hielo, en calma ahora pero bajo la amenaza constante de la tempestad. Un lugar terrible para vivir pero, a su vez, tremendamente hermoso. Uno puede imaginarse como era el mundo, nuestro mundo, la Europa occidental, hace 50.000 años, en aquél tiempo mítico en que los mamuts, los rinocerontes lanudos y los neandertales dominaban los gélidos territorios del viejo continente, cuando el primer Homo sapiens no había plantado aún su huella firme, de colonizador africano, en las tierras de Europa.
Poco más allá-¡que pequeño se hace el mundo cuando uno viaja en avión!- el mar del norte y el mar blanco, antesalas del ártico con sus inmensos bloques de hielo flotante. ¡Cuánto mundo por descubrir para una vida tan breve! Cada día que pasa amo más a este pequeño planeta nuestro, tan hermoso y frágil.





10 comentarios:

Inés Valencia dijo...

Se me ponen los pelos de punta solo con ver las fotos, ni me imagino como debe ser sobrevolar semejante maravilla...

Juan dijo...

Uno de mis sueños es viajar en el transiberiano. Confundirse con la inmensidad es una buena manera de hacerse pequeño, de vernos tal y como somos.

Eli dijo...

Bienvenido de nuevo, Cel.
Impresionantes y maravillosas fotos.
¡Ayns! Dan ganas de viajar (más aún)

Kaken dijo...

No me explico cómo has podido lograr esas fotos desde un avión...son geniales¡

Lenka dijo...

Impresionantes imágenes, Gemelo. Qué precioso planeta tenemos y qué poca vida para recorrerlo!

Comparto tu sueño, Juan, también es uno de los míos. Por si no llegamos a cumplirlo valga (mucho) este regalo que nos hace Celadus.

Gracias!!

Ado dijo...

¿Las fotos las ha hecho tú?. Preciosas, y que envidia más cochina por haberlo presenciado en vivo. Seguro que voy y está nublado (como siempre me pasa cuando voy en avión jajaja)

Fran A.H. Alvarado dijo...

Cierto eso de que necesitaríamos varias vidas para recorrer este pequeño-inmenso planeta. Lástima que nos lo estemos cargando. La mierda negra envenena el Golfo de México...
Un saludo, Fran

Celadus dijo...

Ado, muchas gracias por pasarte y comentar. Si te sirve de consuelo, a la ida era de noche y no vi nada, jeje.

Francisco, encantado de tenerte por aquí. Si te apetece échale un vistazo a mi otro blog "Cuadernos de campo". Aún está en pañalkes pero verás que tenemos cosas en común ;).

Louisette dijo...

Wonderfull fotos articles, greeting from Belgium

Celadus dijo...

Thanks, Louisette