Ferrerirola es un pueblito de la Alpujarra granadina, pequeñito, prácticamente deshabitado la mayor parte del año salvo por algunos residentes permanentes en el núcleo urbano o sus alrededores. O al menos así era hace unos 10 años, cuando yo lo conocí. Del carácter de ese pueblo y de sus habitantes puede dar idea la siguiente anécdota que voy a relatar:
Unos amigos entran en el bar del pueblo. El camarero, apoyado sobre la barra, está leyendo el periódico. Uno de los amigos pide un café. El camarero le mira y asiente pero no se mueve y continúa leyendo. Al cabo de unos minutos de prudente espera, el cliente reclama al camarero y le dice:
-Perdone, pero aquí falta un café.
El camarero levanta la vista despacio del periódico y gira la cabeza para mirar al cliente. Con mucha calma le dice:
-A ver si vas a tener tú ahora prisa o algo…
Nosotros, los esquimales
-
He venido a Madrid tras Filomena. Después de dos días haciendo un
recorrido de media hora por la nieve, ayer vi el documental *Nanuk, el
esquimal* y me ...
Hace 2 años
6 comentarios:
Jeje, típica cachaza.
Tan ásperos como su territorio.
Gracias
Subiremos a La Alpujarra
Ya sé donde no tengo que ir a tomar café.
A ver si actualizamos, jopestes
Quillo, a ver si actualizamos¡¡ :-P
(Niño, no se debe estar tan missing, es insano, en serio)
Coño, tío, actualiza q esto ya güele...!
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